La conjunción de cinco personas amantes del vino, cinco seres tan dispares, únicos y diferentes como el vino.
Tenemos a Gonzalo a un experto en La Rioja y amante de los vinos añejos, cada día mas estupefacto por los vinos de Jerez y dispuesto a catar todo aquello que pase por sus manos.
Es el maestro de la oxidación Cristóbal, por su paladar se han deslizado tal cantidad de vinos que no me atrevo ni ha compararme con el. Es el Arquímedes del vino. Moverá el mundo tarde o temprano.
Es el maestro de la tiza Madame Loire, apodo con la que identifico a la, de momento, única integrante femenina del grupo. Belga de origen, su exquisitez en el vino está a la par de sus conocimientos empresariales en el mundo del vino. París bien vale una misa.
Albert, Maître, Sommelier, comercial, apasionado de su gremio. Nacido para servir y disfrutar sirviendo. Cada vez que me menciona un vino me deja boquiabierto. Aunque adoro a estos cuatro genios del vino, en Albert me veo reflejado por su pasión.
Y finalmente el que escribe estas líneas… Hugo aprendiz de todo y maestro de nada. De profesión vendedor de vino, no me atrevo a llamarme Sommelier, llegue a este mundo de rebote, saltando de fregaplatos a camarero, bartender, barista, maître y director de restaurante.
Mi único merito en esta historia es que me he rodeado de gente inteligente con la que discutir, de la que aprender… Y percatarme de que mi mayor genialidad ha sido embaucarlos, para que se sienten en mi mesa, alrededor de una botella de vino, mas interesante que yo.
Este grupo es por y para ellos. Y estoy aquí para serviles.